Desde medios establecidos hasta las no tan benditas redes sociales desde este miércoles no tienen otro tema que una tal ‘Lupita TikTok’, su esposo el ‘Sonrris’ y el nacimiento de la hija de ambos.
Primero, todas las publicaciones comenten un error al definir a la tal Lupita como ‘influencer’ por el simple hecho de ser viral por un video en el que dijo que el “cuerpo humano tiene siete huesos” y por su situación médico/genética que le produjo una condición de enanismo, además de un trastorno del lenguaje y discapacidad intelectual, y en segundo, peor aún, por estar romantizando la irresponsabilidad, la negligencia y la salud mental en aras de búsqueda de ‘likes’.
En las anteriores y en las siguientes líneas no hay juicios morales pues los derechos humanos son inalienables y todos/todas tenemos derecho a tener una pareja, a unirse y/o casarse, a tener una relación afectiva, formar una familia y tener hijos, pero sí hay señalamientos basados en los hechos y actitudes de los protagonistas de la historia y en el cómo actuamos frente a la pantalla de un celular.
Guadalupe Villalobos, alias ‘Lupita TikTok’, tiene 22 años, es de Monterrey y se hizo popular en redes sociales al mostrar su vida, cantando y bailando un intento de canción. Lo hizo primero sola, luego con su pareja Ricardo Medellin, ‘Sonrris Medellín’, de 46 años, y luciendo su embarazo.
En un video de ambos en sus cuentas de TiKTok se graban, muy agarraditos de la mano, yendo a comprar un doce de cervezas.
De la relación con un hombre mayor, con antecedentes de consumo drogas, resultó un embarazo y el nacimiento de una niña, el pasado 16 de abril, que midió 47 cm de estatura y 2.82 kg de peso, su padre declaró que estaba sana y que Lupita se encontraba en recuperación tras una cesárea, además de reconfirmar que se llamaría Karely Yamileth en honor de la creadora de contenido para adultos Karely Ruiz.
Pero el pasado 27 de abril cuando cuando la bebé fue internada de emergencia por deshidratación e ictericia en el Hospital Materno Infantil de Nuevo León, se desató una investigación.
Previamente, Lupita subió un video donde carga a la recién nacida y la deposita en un sillón de forma inadecuada.
Tras internar a la niña, la presidenta del DIF municipal de Nuevo León, Mariana Rodríguez, reveló que se estaba investigando el caso por posible negligencia y omisión de cuidados además de que existían indicios de consumo de sustancias ilegales entre los progenitores.
Afuera del hospital el padre de la menor se ha dedicado a dar entrevistas y en una de ellas aseguró que su hija sufrió convulsiones, posible muerte cerebral y problemas en el desarrollo de varios órganos, además de acusar al hospital de negligencia de que proceder de forma legal.
Las declaraciones de Ricardo Medellín fueron refutadas por especialistas, pues el cuadro clínico que dice el padre se presenta solo en niños prematuros y Karely Yamileth no fue una bebé prematuro.
Ricardo Medellín, exchofer de transporte público, se ha pasado dando entrevistas afuera del hospital, “le iban a hacer un estudio, que son unas plaquitas; si las rayitas se quedan parejas, la van a dar ya como muerte cerebral. Van a ver si su cerebrito sigue funcionando. Si no salen resultados buenos, ya será muerte cerebral”.
Mientras que en redes sociales ha salido a colación una entrevista en la que explica cómo conoció a Lupita, soltando además una declaración grave, “ustedes la ven menor pero tiene 22 años y yo 46, además cuando tenía 29 estuve casado con una de 14”.
Por ello es pertinente recordar que en leyes, la relación de un adulto con una menor está tipificado como delito de estupro y también como corrupción de menores.
Por la tarde de este miércoles, el ‘mánager’ de la creadora de contenido declaró que, “la niña volvió a convulsionar hoy en la madrugada, aquí estamos sin movernos, sin dormir, sin nada y le dijeron a Lupita TikTok que si la bebé volvía a convulsionar ya no iba a aguantar”.
La declaración en vivo se salió de control pues se puede observar a ‘Lupita TikTok’ en la parte trasera del coche haciendo señas con los dedos a manera de saludo, mientras la desenfocan de la cámara.
La otra Karely, la Ruiz, salió en su defensa, “no es una polémica bebé, es un tema muy serio y delicado, oremos porque la bebita de Lupita esté bien”.
“Ya Dios sabrá lo que va a pasar, dejen de opinar sin saber la situación, aquí lo importante es la bebé”.
Aunque la realidad expuesta en vivo y en directo es otra: la madre de la bebé sigue haciendo su vida normal y asegurando que está muy bien, a pesar de que su hija esta hospitalizada y en situación crítica aumentando las dudas sobre a qué grado es mantener la popularidad en redes sociales cuando se enfrenta a una situación de tal dolor y gravedad.
El caso no solo se mantiene como tema en tendencia sino que ha traspasado a los análisis de los especialistas como el caso del profesor Armando Ávila Dorador quien lanzó un video sobre la inclusión forzada y los derechos reproductivos de personas con evidente discapacidad intelectual ejemplificando con figuras de redes como ‘Doña Lety, ‘Eva Rojas’y la propia ‘Lupita TikTok’, “dejemos de estigmatizar la educación especial y dejemos de engañarnos creyendo que tratar igual a personas con neurodivergencias es lo correcto”.
Ávila Dorador es biólogo y Maestro en Docencia por la UNAM con 25 años como docente en prácticamente todos los niveles educativos, desde secundaria hasta posgrado, dice que, “todas estas personas (las mencionadas arriba) padecen de una enfermedad mental, hace algunos años hubiera sido relativamente simple, como sociedad, aceptar que estas personas son vulnerables, por esa propia condición y se les hubiera dado un trato especial”.
“El problema es que ahora vivimos un tiempo en el que el trato especial se confunde con discriminación y no, no nos confundamos, una persona especial requiere un trato especial justamente para protegerla de lo vulnerable que puede ser, porque de otra manera simplemente sirven para hacer memes, para que se burlen de estas personas, para que hagan escarnio con su condición física”.
En su video, el especialista se adelanto a los hechos que mantienen la atención mediática desde ayer miércoles y mantienen a una bebé en estado crítico, “no es algo nuevo, hace algunos años viste a este personaje en televisión (en referencia al comediante Sammy Pérez) sí puede dar mucha risa pero no está bien, el problema de la inclusión forzada, al menos en el punto de vista educativo es un gravísimo error y el problema que seguimos teniendo con esta sociedad aparentemente moderna donde todos deben tener los mismos derechos y nos ha caído ese tipo de problemas y no, las personas con discapacidad intelectual no pueden tener los mismos derechos porque no pueden asumir las mismas responsabilidades y en ese sentido he visto muchos videos del caso específico de ‘Lupita TikTok’ que actualmente esta en tendencia porque está embarazada y eso obviamente es una irresponsabilidad y no por ella, olvidémonos por un momento de ella, quién ha pensado en el infante, en el hijo que va a tener, porqué nadie piensa a futuro, quién se va a hacer cargo del cuidado de esa persona que muy probablemente puede nacer con esa discapacidad, así que no, no nos confundamos”.
Y cierra diciendo, “la educación especial permite justamente que estas personas lleguen a su máximo potencial y puedan integrarse a la sociedad y la sociedad pueda integrarlos en su neurodivergencia… y no, no los estoy estigmatizando”.
Mientras una bebé de apenas dos semanas de nacida se debate entre la vida y la muerte, aquí estamos ante una tendencia preocupante: la idealización de los problemas de salud mental cuyas consecuencias serán devastadoras a corto y a largo plazo.
Por: Carlos Urquidi
