A diez meses del estreno de la obra teatral ‘La golondrina y su príncipe’, de Alberto Espino, y la pre y posterior molestia de la comunidad artística chihuahuense por su oneroso gasto se informa que en la exigencias del movimiento ‘Artistas, creadores y ciudadanía vigilante’ a las autoridades gubernamentales en general y, con las culturales en particular, para abandonar la toma del escenario se llegó al acuerdo del cumplimiento de cuatro puntos esenciales que redundarían en el crecimiento cultural del estado y sus creadores, a la fecha, solamente uno de ellos se ha cumplimentado y a medias.
Los acuerdos realizados por el grupo de ‘Artistas, creadores y ciudadanía vigilante’ y aceptados por las autoridades estatales fueron: el aumento del presupuesto para el área cultura; una disculpa pública por los denigrantes descalificativos de que fueron objeto los creadores chihuahuenses; la urgente necesidad de dar mantenimiento a los espacios culturales y la conformación de un consejo ciudadano diverso y representativo.
Cabe señalar y recordar que la toma del escenario, el 11 de noviembre de 2022, fue objeto de un insólito despliegue de fuerzas de seguridad tanto estatales como municipales, lo que desató un movimiento de alcance regional, nacional e internacional.
En rueda de prensa informativa, la bailarina Sagrario Silva; el fotógrafo David Lauer y la actriz y abogada Nantha Santana pormenorizaron todo el trabajo de lucha realizado desde el posicionamiento lanzado en octubre de 2022 al enterarse del elevado gasto que se realizaría, además de recordar que el gobierno de María Eugenia Campos desapareció el Festival Internacional Chihuahua, redujo la Feria del Libro y antes, intentó desaparecer la actual Secretaría de Cultura para, “minimizarla a un simple departamento pero no lo logró pues los artistas nos unimos también en aquella ocasión”.
La también actriz y gestora cultural Sagrario Silva Velez reveló que le parece muy sospechoso que en la actual convocatoria del Premio Chihuahua el rubro de Artes Escénicas se haya reducido solo a música, “apoyamos y colaboramos con los creadores musicales, pero es sabido que en Chihuahua no hay gran producción en esa área”.
Nantha Santana precisó que, “el 25 % del presupuesto total del Instituto Municipal de Cultura se fue para ese solo evento, y parece que tenemos un Secretario de Hacienda muy hábil, pues quién saca a mitad de año más de 17 millones para otorgárselos al municipio”.
Agregando de que hay indicios de que este año se volverá a repetir, “no queremos una Estela de luz en Chihuahua ni otro golondrinazo, tampoco queremos que nos vayan a catafixiar los festejos del Bicentenario por el Festival Internacional”.
Por su parte, el destacado fotógrafo David Lauer abordó la falta de mantenimiento a los recintos culturales no solo de la ciudad, sino del estado, “siguen con grandes fallas y es un peligro para el público y los artistas”.
Hoy día, de los cuatro acuerdos solamente uno está en proceso de realizarse, la integración del Consejo Ciudadano Consultivo de Cultura, cuya convocatoria fue lanzada apenas el 31 de julio por la Secretaría de Cultura de Chihuahua; dicha convocatoria se logró tras arduas reuniones del el grupo de ‘Artistas, creadores y ciudadanía vigilante’ con las autoridades culturales y una exhaustiva revisión de los puntos de la convocatoria, “nuestro grupo ha seguido participando en un diálogo complicado, pero finalmente la convocatoria muestra avances importantes en bien de la cultura, siempre y cuando haya una participación importante del sector cultural. Por ello, decimos que este trabajo lo hemos realizado en bien de todos, con la firme convicción de que surgirán dignos y comprometidos representantes de cada una de las áreas que produce y promueve la cultura en el estado de Chihuahua”.
De los otros acuerdos destaca que no ha habido ninguna disculpa pública ni privada, ni se han restaurado los espacios culturales, así como tampoco la gobernadora María Eugenia Campos, ni el Secretario de Hacienda, José Luis Granillo Vázquez, han dado la cara para explicar porqué o cómo se realizó la asignación directa de un solo proyecto y a un solo municipio.
En el grupo, consideramos que la presión ejercida repercutió en un aumento en el presupuesto para la cultura, pero por otra parte se han lanzado y aprobado ya varias convocatorias y proyectos sin apego estricto a la Ley de Cultura de Chihuahua, ya que todavía no se ha conformado el Consejo Ciudadano como lo estipula la ley, por lo tanto, luego de meses de trabajo dialogado con la Secretaría de Cultura, insistimos en que ellos deben de encargarse de divulgar amplia y transparentemente la convocatoria recién publicada para conformar el Consejo Ciudadano Consultivo de Cultura
También, se sigue con una situación de dudosa transparencia sobre todo ante la reserva de toda la información sobre el uso de recursos públicos, de 35 a 50 millones de pesos por doce presentaciones de una sola obra, lo cual es aún vergonzante pues no se ha trasparentado en qué, realmente, se gastó tal cantidad de dinero.
Los representantes del movimiento enfatizaron la falta de transparencia el cerco informativo, legal, institucional y en general de Estado, con la reserva de la información de todo lo relacionado con ‘La golondrina y su príncipe’ por dos años y el rechazo del Congreso del Estado para ordenar una auditoría forense, “sabemos que quien tiene el poder tiene el control de la información, pero también sabemos que el poder no es eterno”